9.12.11

Cuando ya no se tiene qué hacer es que se hace lo que se tiene que hacer.
Es decir dentro de la apariencia de que no hay nada por hacer, es entonces que hacemos lo que tenemos que hacer.

Por ejemplo cargamos cajas de una casa a otra y terminamos tal suceso y alguien nos dice ¿queda más? y se responde que no, y otro pregunta, ¿qué más hay que hacer? nada.

"no hay nada que hacer"

Ese nada que hacer implica hacer esa apariencia de que no estamos haciendo nada.

y si analizamos lo de recién "no estamos haciendo nada" es una doble negación; el "no" y el "nada".

es decir, es un sí; que podríamos aseverar que "estamos haciendo algo"

sin darnos cuenta en esta pequeña extensión lógica nos hacemos cargo de que las apariencias existen científicamente.

No es mito entonces que puede ser que una apariencia ni siquiera uno se entere bien de que estamos en una. Es decir podemos ser parte de una apariencia desde nuestras expresiones, en donde nuestros símbolos expresen algo que no es real desde una perspectiva, pero real desde otra.

por ejemplo en el caso dice "no hay nada que hacer": quien lo dice cree eso, simboliza eso en su lenguaje, y eso que dice ocurre en cuanto a que dijo algo, pero en su contenido no es cierto, pues eso no está sucediendo debido a la doble negación primero (que si bien es un análisis del contenido), también no sucede porque existe un imperativo de que siempre estamos haciendo algo.

y ese algo es siempre. por tanto no podemos negar algo que está por sobre lo individual, sino que en este caso debemos abstenernos a lo social, pero no como subsumido, sino como entendiendo las relaciones humanas mismas. como entendiendo el principio de coacción (Durkheim. E)en el cual existen imperativos que nos obligan. Sobre todo desde el inconsciente.

Es rarísimo este mundo en que la mayoría de las cosas están fuera de lo que creemos, pensamos o inclusive de lo que imaginamos.

Por eso un buen ojo que pueda ver que esto está sucediendo en todos los porvenires de nuestra vida cotidiana podría adelantarse, ordenar mejor su vida, entender mejor a los demás, sus procesos, sus maneras, e inclusive diferente cosmovisiones.

Lo que más he aprendido este año me atrevería de que es esto, y lo más increíble es que no paro de tener pena en estas ideas,

Pues querámoslo o no, todo aparenta de que los sujetos tienen características de masa. así como son las masas, son los humanos sin masas.

La sociedad es una enfermedad, una amargura, tengo tanta pena por eso, tanta

No hay comentarios: