27.11.11

4:09.

No sé cómo distribuir el tiempo en tantas fracciones como lo hacen los demás.
pareciera que en mi ser no opera esa ecuación de saber organizarse (individualmente). siempre me he visto en esa marea, cuando me sumo a una orgánica, dentro de un sistema, y es ahí donde puedo sentirme tranquilo. cuando soy parte de una organización, no cuando la organización soy yo mismo.

Es increíble. cómo nos evalúan en la universidad por nuestro desempeño individual, cuando en el trabajo uno tiene que rendir cuentas a una organización. Cómo es que nos van poniendo notas por la calificación de un contenido que teníamos que aprender individualmente.

Y en esa educación que nos brindan hacia nuestra individualización, se les olvida educarnos para una socialización que incluya en su eje fundamental la solidaridad. no recuerdan que después los problemas en el trabajo son justamente esos. La interacción entre personas dentro de una organización.

El problema central no es cuanto sabe o no sabe.
es cómo asumimos en conjunto los problemas. es ese valor social que debiera ser el método mismo.

es increíble como nos van diciendo y educando mal en ese sentido...

Porque usted puede ser un técnico de cualquier tema, en cualquier área, campo, o especialización. y seguramente sólo aprenderá en la mayoría de sus pruebas y notas, un contenido que sólo esté a fin con su especialidad.

pero mi consulta es.

y ¿qué pasa con la especialidad de lo social?

¿cuándo nos enseñarán un canal de facto que nos integre entre nosotros?

¿por que no existe la educación entre seres humanos sociales?

¿por qué la educación chilena formal apunta a educar económica a-socio-solidariamente?

Lo único que le pido, es que no sea pez en el agua, no sea ingenuo/a, no me responda que con un ramo de religión, de "ética de...", o de derechos y deberes de... va a solucionar toda problemática.

Hágase consciente, lea, cuestione, dude, reflexione, peleé, no se deje pisar, por ningún partido, hipismo, poder, o ciencia.

25.11.11

siempre

como ya es costumbre día a día es igual, no hay nada que decir, ante la gente es así; amigos, simplemente amigos y nada más.

17.11.11

la colibrí y el cóndor.

Hace muchos años, en un lugar al otro lado de la cordillera había de nacer una plumita que con el tiempo se hacía avecita y después colibrí.

En su tiempo de plumita, sólo quería volar arriba del sol para poder conocer el mundo, y miraba y miraba hacia el cielo, y ella sólo caía como buena plumita que era.

Al crecer se hizo avecita y pudo pegar un vuelo que casi le costó la vida en plena juventud pajarracal.

Yo la conocí cuando recién empezó a ser colibrí.

Fue en una fiesta de la radio primero de masho. y cuando la pillé, quise descuerarla entera, sacarle todas las plumas y hacerle el amor. y en mi embriaguez le dije muchas cosas, y al hablarle comprendí de cuán lejos venía.

Se suponía que podríamos haber salido, pero no fue así. me tuve que ir, y al llegar a casa donde mi abuelita en los 3/4 de noche me dormí soñando que volaba y que yo también era pájaro.

Al despertar miré mis brazos que se habían hecho alas, y ya no podía hablar bien con la gente porque se reían de mí. no entendía qué me pasaba, mis patas se me hicieron flacas y sentía la piel de gallina. qué terrible dije para mí.

Así que supuse que era por la colíbrí que había conocío, no me imaginaba que también era bruja, así que la busqué para pedirle que me sanara y me volviera ser hombre como siempre lo fui.

Si bien tenía rasgos de cóndor, no podía volar, así que tomé mi bicicleta y desesperadamente la busqué en un sector popular. Mientras cruzaba Departamental por ]Paseo Gronerth, (y no por av. la feria) se me caían algunas plumas que dejaban camino de desespero en mi aventura.

La busqué por un mes y algo más y nunca la pude encontrar, y sin saber qué pasaba me comencé a rendir, "ya no la voy a pillar, parece que nunca me voy a sanar" me dijo yo mismo a mí.

Es entonces que justo en esos días de pena ella un día me pilló en la micro. la saludé me dijo que en La Victoria estaba lleno de plumas, y que ella también me estaba buscando porque según ella yo era brujo y que se estaba convirtiendo en colibrí.

Cuando me dijo eso yo le sonreí, y ahí entendí, nos enamoramos en la micro y ese mismo día me hice cóndor, y ella colibrí. y abrimos la ventana de la micro mientras iba en movimiento y salimos volando por la ciudad, hasta que nos perdimos en la intimidá. Le dí tremendo beso y ella también me dio uno mí.

2.11.11

carta al(a) lector(a)

si usted es un copuchento o copuchenta, pido el tremendo favor de que se retire de aquí, por otro lado, si usted es riguroso/a con la poesía, la literatura, y le gusta la finura de la lírica, siendo que usted es una persona precisa y justa, entonces se puede quedar; de lo contrario retírese.

por otra parte, si usted es un perrito/a faldero/a que llegó a esta página por el mecanismo de la celosía, entonces quédese; porque yo le voy a decir unas cosas.

¿usted a caso sabe lo que está haciendo?

¿usted, le vuelvo a preguntar: sabe en serio lo que está haciendo?

¿lo pensó? ¿sí?

yo creo que no; porque me da la impresión de que saldrá pelando por ahí con rumores afeminados al susurro de la muerte dicha del verano funesto.

seguramente vendrá acá a querer rescatar información pertinente.

seguramente querrá saberlo todo.

seguramente se siente seguro

pues seguramente acaba de leer estas palabras, usted: sí ... usted mismo



y si leyó las palabras anteriores significa que seguirá leyendo el siguiente secreto que tan secreto no sé si es.

pero le cuento que todavía haré lo que tengo que hacer

todavía desnudaré los oídos a las mujeres que me encandilen con sus pestañas

bien puestas, luego de que al unir nuestras mejillas hagamos una vez más el amor

tan fulminante como si exprimiéramos nuestra sangre en jugo dulce de placer y goce.

le cuento que hay algo que usted no sabe, que me aventaja con creces... que es la

hambruna de pasión que me seca por dentro como si fuera esa bella curva

mi oasis de locura tan tierna y frágil como la olita del lago sureño.

seguramente no se imagina la manera en que he visto tanta blancura, ni la sorpresa

que me late una vez terminada cada triste tarde de primavera.


Pues he besado esos médanos de lujuria que se han silenciado en mi olfato

como si fuera un soldado que metralla besos al desespero de cada sueño por su

tortuosa finitud.

1.11.11

fue como comer lechuga en invierno

recitar a las masas sin que haya nadie

ser famoso debajo del mar.


Fue el perrero comiendole la cola los lobos

la hojita seca pisada por la paja

fue que te cambie mi chocolate por tu cloro.


Pues fue un piso lleno de balines

con mi piel moreteada de protestas, pulsos y gatos

con el acto fallido del vino clandestino.